November 22, 2014

Pablo Iglesia’s offer of a 35-hour workweek and a retirement age of 60 in Spain, sounds more like a “No se podrá”

Sir, I have surprised read Tobias Buck reporting that Pablo Iglesias, of Podemos (we can), suggests “a 35-hour work week and lowering the retirement age to 60”, “Spanish upstart party challenges status quo”, November 22.

Sincerely, in a so job starved Spain, that sounds to me much more like a giving up, like lets share the leftovers, like a defeatist “No-Podemos”.

If that is what Spain wants, then Spain is truly in big trouble.

I hope Spain understands that speaking engagingly, emotionally and with great empathy of the problems of a nation, has absolutely nothing to do with the capacity of solving those problems, on the contrary, these are often worsened by experts in verbal populism. (See: Venezuela)

If I was a Spaniard, and a bit similar to Churchill’s “Blood, sweat and tears”, I would now be arguing: “We can (nosotros podemos) and must get out of this sorry mess, and make Spain great again, even if that takes a 60 hours working week and forces us to work until we’re 100”.

PS. When an Executive Director of the World Bank, 2002-2004, it was a great honor for me to be sitting in the chair which represented, among others, Spain and Venezuela.



La oferta de Pablo Iglesias de 35 horas de semana laboral y 60 años para la jubilación, me suena más a un ¡No Podemos¡ 


Señor Editor, sorprendido leí a Tobias Buck informando que Pablo Iglesias, de Podemos, sugiere "una semana laboral de 35 horas y la reducción de la edad de jubilación a los 60", "partido advenedizo español desafía status quo", 22 de noviembre. 

Sinceramente, en una España tan  hambrienta de empleos, eso me suena mucho más como un abandono, como a un vayamos a compartir las migajas sobrantes, como a un derrotista "¡No-Podemos!". 

Si eso es lo que España quiere, entonces España esta realmente en serios problemas. 

Espero que España entiende que el poder cautivar hablando con gran empatía de los problemas de una nación, no tiene absolutamente nada que ver con la capacidad de resolver tales problemas, por el contrario, éstos son a menudo agravados por los expertos en populismo verbal. (Ver: Venezuela) 

Si yo fuese español, y algo similar a lo de "sangre, sudor y lágrimas" de Churchill, yo estaría ahora argumentando: "Nosotros sí podemos y tenemos que salir de nuestra triste situación, y hacer de España de nuevo grande y fuerte, incluso si esto nos obliga trabajar 60 horas por semana hasta los 100 años". 

PD. Cuando fui un Director Ejecutivo del Banco Mundial, 2002-2004, fue un gran honor para mi estar sentado en la silla que representaba, entre otros, a España y a Venezuela.